Javier Valenzuela director de cine

Javier Valenzuela director de cine

jueves, 15 de marzo de 2018

NUEVA ENTREVISTA

La revista Moon magazine se hace eco de mis nuevos proyectos. También investiga en mi pasado profesional para entender mejor mi trayectoria.
Por otra, quisiera aprovechar para compartir una reflexión que me sobrevino tras responder las preguntas de este tipo de conversaciones. Y es fruto de los recuerdos y la introspección hacia mis orígenes que me han hecho revisar mi evolución como persona y profesional. Me he reencuentrado con mis referentes personales y profesionales (mi abuela, mis tías/os, mi padre, primos, amigos, mi madre y mi PAREJA); mientras contestaba las preguntas de la revista.
Estos diálogos interpersonales con periodistas y/o escritores me hacen focalizar la atención en el pasado para entender mejor mi presente y proyectarme coherentemente en el futuro. Un futuro esperanzador y despejado.
Soy fruto de muchas cosas y, ahora, me quedo con la energía acumulada que absorbí de los seres queridos. Y al final, bajo capas de técnicas narrativas, esa energía es la que queda y lo que me impulsa a seguir narrando historias. Aquí tenéis el link para leer la entrevista.
Por último agradezco a Jose (el entrevistador) y al medio por su interés y profesionalidad.


Atentamente, Javier Valenzuela.

jueves, 25 de enero de 2018

¿AHORA QUÉ? - MICRO RELATO


Una mano golpea ligeramente con un hacha un robusto pilar. De fondo se escucha una discusión, una niña grita y provoca a un hombre. Tras varios golpes precisos la superficie del pilar se esquirla cuando…

… la tersa tez de Oria, una endeble niña de diez años, se estampa brutalmente contra la madera de una mesa redonda en mitad de una lúgubre, pequeña y sucia taberna. Un hombre nervudo y alto, ataviado con pieles, aprisiona el rostro y los cabellos rubios de la niña. El resto de los pocos clientes de la taberna no se inmutan y beben iluminados por el crepitar de la tímida luz de vela. Ni siquiera el posadero reacciona, pues tiene asumida la autoridad que ejerce el batidor llamado Dante. No es la primera vez que increpa violentamente a otro cliente, sea mujer, hombre o niño. No hace diferencias.

La sangre brota de la delicada nariz de Oria y definitivamente Dante lanza su cuerpo inerte contra el astillado suelo de madera. Los pulmones de Oria instintivamente arrojan un enérgico hálito que se percibe como un lamentable gemido.

— ¿Ahora qué? — le impugna Dante –- ¿Ves cómo estás mejor con la boca cerrada, rata?

Oria trata recuperar el aliento, algo que no es del agrado de Dante, así que rápidamente el cazador agarra a la infante y carga su brazo derecho para aplastarlo contra el empapado rostro de la infante. Dante imagina el sonido roto del hueso tierno, el angelical quejido de Oria. El hombre coge fuerzas y…

— ¡Disculpa!

La voz de Aldara inunda momentáneamente el salón. No ha sido un grito sino, más bien, una potente proyección de su carismática voz. Dante se gira sorprendido y descubre a una menuda mujer pelirroja ataviada con una túnica sin capucha junto un pilar astillado y duro de madera.

— ¡Ey! ¡Deja a la muchacha! — en esta ocasión se trata de la voz de Elvira, con una energía más brusca y amenazadora. 

Tras Aldara, desde un rincón más oscuro, al fondo de la taberna, aparece Elvira, una mujer alta y robusta con un manto de seda negra. 

— ¿Acaso tienen que recordarte el sabor de tu propia sangre? — le increpa Elvira.

Aldara le hace un gesto y roza finamente a Elvira. Los fibrosos hombros de la guerrera se relajan. Deja escapar un ligero soplido, baja su vista y se aparta para que Aldara se adelante. La mujer bajita se acerca a Dante. Su caminar, fluido y lento, genera una sensación en el tiempo. El fuego parece ralentizarse, las fosas nasales de Dante suenan más graves, las diminutas alas de un insecto zumban etéreamente. Aldara se posiciona finalmente muy próxima a Dante. La luz de una vela ilumina más claramente el rostro de Aldara. La mujer está al lado de Dante y éste queda confundido. Y no es por la belleza de la chica, todo lo contrario. Los cabellos rojizos de Aldara están recogidos y acentúan, si cabe, las alargadas proporciones de su rostro y su nariz aguileña. El batidor percibe un halo de fuerza sobre la mujer. Ésta viste con unos hábitos propios de una clérigo guerrera del Norte pero ¿Cómo puede ser? No aceptan a mujeres. Dante siente una venenosa punzada en su corazón, una sensación avinagrada procedente del estómago que le impulsa a levantarse enérgicamente y encararse a la diminuta mujer. Al hacerlo, la maltrecha niña, cae al suelo sin oposición como una muñeca de trapo.

— ¿Ahora qué? — Dante acerca el rostro a la mujer, mucho más baja que él. —

— Ahora podrías estrellar tu rodilla contra mi rostro. Seguramente romperías mi nariz y el propio dolor me haría caer al suelo— realiza una pausa mientras mira donde está la niña y da unos pasos leves hacia atrás, acercándose al pilar de madera. Prosigue — A partir de ahí… tendrías tantas posibilidades para seguir sometiéndome. 

— ¿Estás loca, mujer?

Tras una breve pausa y dar un paso más hacia el pilar…

— ¿Realmente vale la pena? — cuestiona Aldara — ¿Cuántas veces ten…?

Y, como un rayo, el fibroso brazo de Dante busca rebanar y dañar la cabeza de Aldara que, sin embargo, con una agilidad gatuna, consigue desviar y estrellar el puño contra el pilar de madera aprovechando toda la fuerza del golpe. Varias esquirlas irregulares se confunden en el flácido pellejo del cazador. Piel, madera, heridas, plasma, aullido, dolor y el abismo.

Dante se desploma, derribado por su congoja de fuego fragmentado. Y como si una porción de ese tormento tratará de huir por su boca, el batidor brama. Brama y vuelve a bramar. 

Las dos mujeres se acercan al hombre sujetando a la niña en brazos y sonriendo le preguntan.

— ¿Ahora qué?




Javier Valenzuela

miércoles, 13 de diciembre de 2017

MICRO RELATO

CEGUERA
Los arbustos susurran un lenguaje ancestral. Un zumbido estremece las hojas de un viejo bosque,  meciendo al mismo tiempo, los alargados pinos centenarios. El sol se esconde tímidamente bajo el horizonte.
Jaime, un hombre de piel pálida y castigada, gafas de sol, barba poblada y una edad cercana a los 50 años, agarra la diminuta mano de Jordi, un niño de mirada brillante. En la otra mano, Jaime tiene un móvil de última generación. Y en su cuello sostiene una figurilla de cerámica con forma de hada. El pequeño infante, guía al hombre por un camino estrecho custodiado por altas barreras verdaceas y una nutrida vegetación.
Una diminuta gota desciende animada por la frente de Jaime hasta perderse tras sus gafas.
Jaime se detiene y fuerza a que Jordi haga lo mismo.
El hombre barbudo se quita las gafas. Sus ojos son de color blanquecino y están sin vida.
La mano del hombre busca a la del niño. No la encuentra. Da un paso hacia delante, otro atrás, pero no se hace con el infante. Le llama. Primero a un volumen bajo, después con mayor intensidad, requiriendo coger una importante bocanada de aire.
No da con ninguna señal de Jordi. Sólo viento, hojas, rugosidad y un infinito vacío.
Jaime coge su móvil. Marca un número. No hay respuesta. Vuelve a llamar. Tampoco hay contestación. El adulto levanta su rostro angustiado ¿Qué habrá sido del niño? ¿Dónde se encontrará? ¿Habrá sufrido algún mal?
No da con ninguna señal de Jordi. Sólo viento, hojas, rugosidad, angustia y un infinito vacío.
VACÍO…



… y un zumbido.
Jaime no ve nada. Pero sí comienza a percibir algo fuera del alcance de sus cuatro sentidos. No es algo que pueda explicar. No, al menos, con palabras. Es una especie de cosquilleo que recorre su espalda. Unos impulsos energéticos que nacen en su nuca y se van extendiendo hasta las yemas de sus atrofiados dedos.
La piel de Jaime se ilumina, cada vez más.
Una potente claridad se esboza entre la espesura de la vegetación naranja, marrón y verde. Esos colores y detalles que Jaime no ve pero sí siente de alguna extraña forma. Ese silbido constante y creciente que, ya, en ese momento, se clarifica hasta concretarse en una sosegada respiración. Y en ese momento, no sabe muy bien por qué, Jaime es invadido por unos remotos recuerdos de su infancia en su pueblo natal, cuando todavía no había perdido la visión y al poco de ir a vivir a la ciudad. Justo cuando su mundo había sufrido una evidente transformación.  Justo en aquellos meses en los que perdió su vista. Desde entonces sólo podía recordar olores ocres, desaturados y grises que le habían hecho olvidar el campo y su vida pasada.
Jaime comienza a recordar. Sus ojos se van imbuyendo de vida y vuelven a cobrar vida gracias a aquella luz. Y donde había gris, ahora aparece la vitalidad de su verde miel.
Jaime instintivamente acaricia el colgante con forma de hada, el cual brilla bajo la potente luz que emerge de entre los árboles.

La presencia se acerca cada vez más. La puede adivinar. Y por primera vez, desde hace décadas,  puede verla. Sí. Ante él se revela la verdadera belleza relegada.

Atentamente, Javier Valenzuela.

miércoles, 22 de noviembre de 2017

ESTRENO SPOT EN CINES

Hace unos días participé en el estreno en cines de un spot publicitario navideño ante casi un millar de personas en los Kinépolis. En este proyecto trabajé como guionista y, a través de las necesidades del cliente, que está apoyando la unión entre la publicidad tradicional y la narrativa cinematográfica, generé una obra de unos 3 minutos de duración. Después de su paso por cines en estas vacaciones, se exhibirá en abierto por las redes.



Atentamente, Javier Valenzuela.

ILUSTRACIÓN APLICADA AL CINE

 Hace unas semanas realicé la prueba de nivel en el curso de ilustración de la Escuela Superior de Arte y Tecnología (ESAT) con la idea de usar estos conocimientos en conceptos de diseño visual para mis proyectos cinematográficos.
En la fotografía de arriba podéis revisar una de las ilustraciones que realicé. Me pidieron que hiciera lo que me viniera a la cabeza y de lo primero que se me ocurrió fue la imagen de un misterioso personaje en busca de algo en mitad de una noche cerrada. La segunda imagen es una muestra del uso del color y creación de un ojo humano.



Atentamente, Javier Valenzuela.

EL DÍA A DÍA DEL DIRECTOR DE CINE

Desde el exterior, el trabajo de un director de cine sólo se llega a apreciar en una parte muy ínfima. Cuando llega (si llega) el estreno de un film, ha sido fruto de meses o años de reuniones con inversores, productores, actores y otros agentes del sector privado y público. Pero para quienes me conocen os imaginaréis que no paro.
Sigo haciendo cine en las sombras, desarrollando proyectos y disfrutando en el proceso (o intentándolo). Soñando con el siguiente proyecto hecho realidad. A pesar de las trabas y los retos sigo amando el cine igual (o más) que el primer día.




Atentamente, Javier Valenzuela.

lunes, 23 de octubre de 2017

VERANO 1993

A ver. Lo voy a decir bien claro. Ayer fui a ver Verano 1993 al cine y es, sin lugar a dudas, uno de los mejores films que he visionado en toda mi vida.
Sí, puede parecer una exageración. Incluso algo gratuito y precipitado pero, evidentemente, no lo es. Y os lo voy a explicar.
Primero porque es una propuesta arriesgada. No sólo en su ritmo, a veces lento a causa de sus puntuales desiertos dramáticos; sino también por su puesta en escena. Por el peso predominante en pantalla de dos personajes que no superan los 6 años y, para más inri, por ser la ópera prima de la directora (Carla Simón).
A todo esto hay que sumarle otro valor imprescindible. La guionista (la misma Carla) ha conseguido conciliar la sensatez con la emoción. Y por lo tanto este film te hace vibrar con el recuerdo de lo vivido. De lo pasado, presente y futuro. Es un alegado de las emociones y la torpeza con la que lidiamos día a día. Creo que deberíamos alegrarnos de que existan obras como esta. Y me hacen pensar que deberían ocupar un lugar más vistoso. Porque a diferencia del cine-espectáculo, estos viajes desarrollan nuestro sentido crítico y no nos abruman ante un espectacular despliegue de medios técnicos. Los personajes y su diseño son el vehículo más valioso con el que contamos los cineastas y puede ser peligroso que los arquetipos y estereotipos predominen en las pantallas. No debemos olvidar esos personajes contradictorios que buscan perdidos una acción o reacción para sanarse internamente. No somos Dioses o modelos pero, por otra, todos sí que tenemos, tendremos o tuvimos un verano en 1993. Es algo universal. Todos sufrimos/disfrutamos de nuestras imperfecciones. Que no se nos olvide ante tanta falta de diálogo y empatía en la actualidad.


Atentamente, Javier Valenzuela.

viernes, 20 de octubre de 2017

ENTREVISTA EN KAIZEN PROYECTOS


La empresa de marketing y comunicación me acaba de realizar una entrevista. Espero que te guste. Desde aquí le agradezco su atención a Kaizen. 

P- Javier, preséntate a los lectores citando:
Un libro: ‘El juego del ángel’ de Carlos Ruiz Zafón
Una película: ‘Hijo de los hombres’ (2006 – Alfonso Cuarón)
Una canción: ‘Imagine’ de John Lennon
Un lugar: Un plató o un set de grabación, sea donde sea.
Un momento: Cuando veo en una grabación a todo un equipo haciendo realidad mi visión sobre una historia determinada.
Un hábito: hacer deporte o leer.
Un recuerdo: mi madre sonriéndome después de leerme un cuento.

P- ¿Cuándo descubriste que querías dedicarte al cine y la producción audiovisual?
R- Creo que desde siempre he tenido esa certeza a pesar de no haberla concretado hasta mis años universitarios. Es algo que vibra en mi interior. Para mí, el impulso de traducir mi visión del mundo al audiovisual es determinante.

P- ¿Qué es para ti el cine?
R- El cine es un lenguaje especialmente sensorial que explora la condición humana … nuestras inquietudes. Me ayuda a conectar conmigo mismo y con mi entorno ya que potencia el diálogo.
Para mí el cine representa una de las capacidades innatas más maravillosas  del Ser Humano: su curiosidad, su imaginación.


P- ¿Qué piensas que aporta a la sociedad la industria del cine?  ¿Crees que tiene un impacto social y cultural positivo?
R- El séptimo arte genera mucha riqueza material e inmaterial si se gestiona adecuadamente. El ejemplo conocido de Francia demuestra lo que estoy hablando. Hay que comprender que el cine suele requerir de casi todas las disciplinas artísticas. Por cierto, aprovecho para explicar mi opinión unificadora del arte. Creo que hay que aprovechar el calado que el cine genera y usar el esfuerzo de talentos de la pintura, música, etc. para reconducirlos hacia el cine. Es una visión pragmática que tampoco debería olvidar totalmente el carácter independiente de las otras expresiones artísticas.  Dicho esto, prosigo.
Como decía, se generan muchos puestos de trabajo y además vivimos una época donde las cuotas de consumo de audiovisual son las más altas de la Historia. Por lo tanto, el uso que se le da es incuestionable. A la población le interesa más que nunca el cine, el formato vídeo. Si bien es verdad que la forma de consumirlo es diferente (y es más que natural). Incluso progresivamente las experiencias van siendo más inmersivas gracias a los avances tecnológicos. El cine despierta interés desde su misma creación y, por lo tanto, no entender a nivel económico su importancia sería un error.
Además, hay que saber que realizar cine patrio ayuda a generar una mirada positiva a nivel turístioa. Todo el mundo se ha creado una imagen de EEUU en gran medida por sus más de 100 años de tradición cinematográfica. El cine es una de las mejores herramientas de promoción de un país para generar una imagen atractiva y positiva. El Made in Spain cinematográfico existe y debería potenciarse.
Por último, a nivel cultural el cine propone valores de desarrollo personal y social a través de los personajes, sus sentimientos y los conflictos y situaciones que deben resolver. En muchos films se reflejan puntos de vista éticos sobre política, economía, tecnología, etc; el cine es un buen reflejo de nuestras dudas  e inquietudes.  Para mí, el cine fue una plataforma a través de la cual observé incluso valores más honestos puntualmente que los que encontraba en mi entorno (colegio, familia) y, por supuesto, sigo viéndolo.


P-  ¿Qué es lo que más te apasiona de tu profesión?
R- Ahondar en lo inmaterial, en la psique humana. Me apasiona hacer visible (a través de las imágenes o el audio) lo invisible (emociones, ideas, sensaciones). El cine, por su carácter puro y sensorial , capta las verdades emocionales y existenciales que a veces sólo percibimos. No es tan preciso como el lenguaje escrito pero sí que logra ahondar en lo abstracto :
¿Os dais cuenta en la importancia del cine?
Es mágico. De hecho esto es lo que hace que no me canse de este trabajo. Siempre hay algo “inexplorado” por conocer.
Como diría Jung, el cine es una herramienta maravillosa para  ‘hacer consciente lo inconsciente’.

P- Se dice que vivimos en la era de lo audiovisual: ¿Qué tiene este formato de comunicación que tanto engancha?
R- Su naturaleza estimulante. Cuaja muy bien con nuestros 5 sentidos (aunque parezca mentira). Por eso un film se percibe tan real. Porque consigue que sintamos lo que nos muestra como algo nuestro. Y no hace falta que esa realidad sea explicada. Para nada. La sentimos en nuestro propio cuerpo, de forma orgánica, con cosquilleos, lágrimas, temblores, risas, etc. El cine genera impulsos y cargas energéticos en nosotros.
Y, además, el cine es valiente y viaja donde no haríamos sino fuera de su mano: logra llevar la mente humana a donde no puede llegar el cuerpo.

P- Eres socio fundador de la productora audiovisual Valen Arts: 
¿Qué tipo de servicios ofrecéis?
R- Ofrecemos proyectos de ficción con una calidad artística y económica remarcables y siempre estamos a la búsqueda de coproductores y/o inversores. Tenemos experiencia con medios públicos y privados y nuestras obras han sido reconocidas a nivel internacional.
También servicios de realización de vídeos publicitarios originales, emotivos e interactivos. Como especialistas brindamos la mejor opción siempre para el cliente. Abarcamos desde la producción, la creatividad hasta la dirección. Pero como siempre decimos, lo mejor de nosotros se descubre conociéndonos.

P-  ¿En qué se diferencia hacer cine de hacer spots publicitarios, por ejemplo? ¿Es muy diferente el mundo del cine del sector del marketing y la comunicación empresarial?
R- La publicidad suele estar más organizada. Hay un cliente que debe entender y aprobar todo el proceso. Se realizan ilustraciones para que pre-visualice la obra antes incluso de comenzar la pre-producción.
La diferencia es que creativamente no suele haber tanta libertad.
Yo aconsejo que la comunicación empresarial de este tipo apueste por el llamado ‘dramanagement’ que  no es otra cosa que usar la fuerza de la dramaturgia .propia del cine. para transmitir mensajes a los potenciales clientes.

P-  Eres profesor en la Escuela de Cine NUR de Valencia: ¿Por qué  elegiste dar clases de cine?  ¿Qué te aporta el rol docente?
R- Dando clases se aprende mucho , je,je,je ¡Vaya respuesta!
No, ahora en serio.
Hace 3 años comencé a dar clases de forma más constante porque el cine no me daba una estabilidad económica y amplié mis servicios profesionales con la docencia. Al desarrollar mi carrera profesional en este sentido confirmé que si soy algo ante todo es, sin duda, un comunicador. Disfruto transmitiendo ideas. Lo que más me apasiona de esta profesión es que doto de sentido a todo lo que enseño. Busco primero lo útil y los puntos con los que pueda captar el interés. Algo que hubiera apreciado mucho en mi etapa estudiantil. Procuro inspirar al alumnado y generar un canal de comunicación fluido para sacar lo mejor de ellos y de mi mismo.
Por una parte, creo que los Humanos percibimos mejor las cosas como un proceso  y, por lo tanto, cualquier aprendizaje debe enfocarse de esta manera.
Y, por otra, la predisposición de cualquiera debe conquistarse ganándose su confianza mediante señales de escucha,  respeto y cercanía. La comunicación no puede ser unilateral. El maestro debe abrirse al grupo, ser receptivo y en concreto, en ese momento, debe hacer un ejercicio de empatía para llegar a conectar con el alumno.  Una vez has activado ese mecanismo es más fácil que fluya todo.
Aprovecho para recomendar mi video blog VLOG DE UN CINEASTA donde voy mostrando distintos aspectos de esta profesión.


P-  ¿Qué te gustaría hacer si tuvieras los medios?
R- Si tuviera medios ya estaría grabado un largometraje cada año de ciencia ficción, fantasía o suspense con proyección internacional.
También realizaría un cortometraje anual y una serie de TV elaborada (a lo ‘True Detective’, ‘Black mirror’, ‘Stranger things’, ‘El ministerio del tiempo’, ‘Estoy vivo’ o ‘Dos metros bajo tierra’).

P- ¿Qué le dirías a los lectores que lean esta entrevista?  Emprendedores, futuros profesionales del sector audiovisual y cinematográfico, jóvenes, etc.
R- ¡Mucho ánimo! Que pongan el foco y trabajen en la consecución de sus metas. Querer es poder.

Atentamente, Javier Valenzuela.


jueves, 6 de julio de 2017

VLOG DE UN CINEASTA - VIAJAR POR TRABAJO

Esta semana os hablo sobre una de las cosas buenas de trabajar en cine y publicidad: VIAJAR. Estas semanas están siendo intensas pero, realmente, me encantan ¡Que el ritmo no pare!


Atentamente, Javier Valenzuela

lunes, 26 de junio de 2017

VLOG DE UN CINEASTA - ORGANIZA TU TIEMPO

Los cineastas freelance tenemos que organizar nuestro tiempo si no queremos morir en el intento. Esta semana os enseño cómo hago para ser más productivo. Ya sabéis, dejar comentarios, compartir y, ante todo, DISFRUTARLO.


Atentamente, Javier Valenzuela

miércoles, 14 de junio de 2017

VLOG DE UN CINEASTA - AYTE. DIRECCIÓN 2

Esta semana os hablo sobre un accesorio interesante para cualquier AYUDANTE DE DIRECCIÓN profesional.
Espero que os guste. Buena semana, cinéfilos/as.



Atentamente, Javier Valenzuela

lunes, 12 de junio de 2017

VLOG DE UN CINEASTA - GUIONISTA 1

En esta nueva entrega de mi VLOG os explico brevemente una herramienta interesante de trabajo para cualquier GUIONISTA: las pizarras o diagramas de post its. Dejar comentarios, dudas y compartir si os gusta.



Atentamente, Javier Valenzuela

jueves, 8 de junio de 2017

PREMIO EN CASTELLÓN

Nuestra obra OLVIDO recibió premio en el concurso de cortos de Castellón. Dedicado a mis abuelos que tuvieron que tratar con el Alzheimer.


Atentamente, Javier Valenzuela

miércoles, 7 de junio de 2017

Consejos de WOODY ALLEN para escribir un guión cinematográfico


A continuación, 5 consejos, cada uno correspondiente a un aspecto diferente del proceso de la escritura:

1. Sobre la escritura del subconsciente:

"Lo que la gente que no escribe no entiende es que piensan que tu compones una línea de forma consciente -pero no es así-. Esta procede de tu inconsciente. Así que tienes la misma sorpresa cuando emerge, que la que tiene el público cuando el cómico la dice. No pienso en la broma y luego la digo. La digo y luego me doy cuenta de lo que he dicho. Y me río de ella, porque yo la estoy escuchando por primera vez." - Woody Allen para la revista Esquire, 2013.

2. Sobre no tener que preocuparse por el éxito con la crítica:

"Esa es una de las cosas buenas de la escritura, o de cualquier arte; si la cosa es real, simplemente vive. Todo el alboroto sobre el éxito o el rechazo crítico, nada de esto importa realmente. Al final, la cosa va a sobrevivir -o no- por sus propios méritos. No es que la inmortalidad a través del arte sea cualquier cosa. Truffaut murió, y todos nos sentimos muy mal por ello y hubieron elogios adecuados y sus maravillosas películas viven, pero eso no fue de mucha ayuda para Truffaut." -Woody Allen para The Paris Review, 1985.

3. Sobre ​​dejar ir la perfección:

"Como artista, siempre se está luchando hacia un logro definitivo, pero parece que nunca se llega a él. Usted filma una película, y el resultado siempre pudo haber sido mejor. Intenta de nuevo y falla una vez más. En cierto modo me resulta agradable. Nunca pierda de vista su objetivo. Yo no hago mi trabajo para ganar dinero o para romper récords de taquilla, simplemente trato de que las cosas salgan. ¿Qué pasaría si yo alcanzara la perfección en algún momento? ¿Qué iba a hacer entonces?" - Woody Allen para The Talk, 2012

4. Sobre esbozar antes de escribir:

"Para mí, la tortura es conseguir la idea, trabajar para llevar a acabo esa idea -la trama general, la estructura y la historia-. Pero una vez que lo sé, puedo escribir un guión en dos o tres semanas. Es la diferencia entre escribir y escribirla. Llega a ser agradable para mí y fluye fácilmente porque he hecho todo el trabajo de pala de antemano." - Woody Allen para The Hollywood Reporter, 2012.

5. Sobre el robo de los que han venido antes:

"Oh, yo he robado de los mejores. Quiero decir que he robado a Bergman. Yo he robado de Groucho, he robado a Chaplin, he robado cosas de Buster Keaton, de Martha Graham, de Fellini. Quiero decir que soy un ladrón desvergonzado." - Woody Allen para la revista TIME, 2009.

Extraido de "En Filme"



Atentamente, Javier Valenzuela

miércoles, 31 de mayo de 2017

VLOG DE UN CINEASTA - ENSAYOS

Desde Madrid, y más en concreto desde un cuarto de baño, os explico (como bien puedo) las funciones que tiene un AYUDANTE DIRECCIÓN en un ensayo con actores. Pienso que, por desgracia, en las series de TV, no se dedica tiempo a trabajar este apartado y, al final, se nota en el resultado. Un tirón de orejas para todos los cineastas que no entendemos la relevancia de que los actores dispongan de tiempo para que conecten con el texto literario a través del trabajo del director. Luego no nos quejemos de que los españoles veamos nuestro audiovisual como algo "a mejorar" en algunas ocasiones. Pero esto será un tema a tratar en otro vlog.
Gozarlo, dejar comentarios, dudas o demás interacciones. Y recordar ¡DISFRUTAR DEL CINE!


Atentamente, Javier Valenzuela